Respeto, tradición, elegancia, pasión, inclusión, equilibrio, velocidad: estas son las principales características que distinguen al deporte de la esgrima. En 2022, la Embajada de Italia en Madrid fue la primera sede diplomática italiana en el extranjero en llevar a cabo, en colaboración con la Federación Italiana de Esgrima (FIS) y la correspondiente Federación Española (RFEE), una iniciativa, centrada en la alimentación saludable, que seguía el protocolo de colaboración que la propia FIS había firmado con el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional de Italia para poner en marcha el proyecto «La belleza en un gesto».
En aquella ocasión, al término del acto, la Embajada obsequió a todos los miembros de la selección italiana presentes -que al día siguiente participarían en los partidos del Mundial- con un farolillo estilizado, realizado mediante la técnica de impresión 3D. ¿Por qué un farolillo? Si uno se fija en la posición tradicional que adoptan los esgrimistas durante un duelo, uno de los brazos, el que está armado, suele estar estirado hacia delante, o bien dedicado a acciones de ataque o defensa. El otro brazo, en cambio, se mantiene hacia atrás y hacia arriba. Sin embargo, no se trata de una simple cuestión de estilo o equilibrio. En la antigüedad, de hecho, el brazo desarmado se utilizaba para llevar una linterna con la que iluminar el lugar del desafío o incluso para deslumbrar al adversario.
En continuidad con lo realizado en 2022, la Embajada de Italia en Madrid, de nuevo en colaboración con la FIS y la RFEE, y con motivo de la llegada a España del equipo nacional masculino y femenino sub-20, dirigido por Luigi Miracco, organizó el viernes 15 de diciembre una nueva iniciativa consistente en una mesa redonda sobre la historia de la esgrima en Italia y España.
Para ello, algunos de los más renombrados maestros de esgrima italianos y españoles, Giancarlo Toran, Jesús Esperanza y Alberto Bomprezzi, tomaron en sus manos una linterna imaginaria para ilustrar las principales etapas de una práctica centenaria que se ha convertido en una de las disciplinas olímpicas más espectaculares.
En relación con el acontecimiento, el Embajador Buccino Grimaldi afirmó lo siguiente: «No sólo será un excursus histórico, sino también una forma de destacar los valores de la esgrima y su impacto en la sociedad contemporánea. La iniciativa se dirige a los historiadores, a los amantes del deporte y de la esgrima, a los italianos en España y también a las jóvenes generaciones para las que la cultura, la tradición y el sentido de pertenencia desempeñan un papel importante en su propio crecimiento, ante todo como seres humanos y un día también profesionalmente».
Dado que la iniciativa formaba parte del proyecto «La belleza en un gesto», la Embajada consideró que el marco ideal sólo podía ser el Círculo de Bellas Artes de Madrid, al que agradecemos su colaboración.
Al finalizar el acto, tuvo lugar en el mismo Club un duelo teatral entre el maestro Jesús Esperanza y su alumno Andrés García.